Las altas temperaturas nos avisan de que se acerca el verano. La estación del año tan esperada por sus vacaciones, horas tumbados en la playa o andando por la montaña, por esos paseos en bici, por esas largas noches en las terrazas, conciertos al aire libre… Maravillosa estación que nos permite gozar de mucho más tiempo al aire libre y del sol pero a la vez  necesitamos más antioxidantes que nunca para compensar los radicales libres creados por las grandes exposiciones solares. Necesitamos hidratarnos más para compensar la pérdida de agua por las altas temperaturas que sometemos el organismo.

Pero antes que llegue el verano oficialmente nos podemos beneficiar de las maravillosas propiedades  de una de las frutas más deseadas de todo el año… ¡Las fresas! 

¡¡¡Estas pequeñas bombas de antioxidantes con forma de corazón que a muchos nos lo tienen robado!!!

Las fresas que conocemos son el resultado de cruzar las fresas silvestres con la variedad americana. Dando un resultado una fruta llena de flavonoides, minerales como el magnesio, potasio y cobre, vitaminas del grupo B y sobretodo vitamina C. Con propiedades diuréticas sobretodo a lo que se refiere a sus hojas. O sea, que ya lo sabes… a partir de ahora ( en caso de que no  lo hicieras )…  ¡no tires las hojas ! las puedes aprovechar  para nutrir un batido o una ensalada 😉

Son altamente antioxidantes lo que nos ayudan a retrasar el reloj del envejecimiento, a contrarrestar el proceso oxidativo producido por el estrés, el sol, el humo, la contaminación…

Su color tan característico las hace ser un manjar muy apetitoso, ya que la vista es el primer sentido que se nos activa antes de comer potenciando así una buena digestión. Vamos..  ¡que también comemos por la vista! Siendo una parte muy importante de cuidar el aspecto de nuestros platos, sobretodo si tenemos que preparar para los más peques de la casa.

Para mantener el color rojo tan bonito y vivo de las fresas, mejor evitar las cocciones a parte que es la manera de conservar sus maravillosos nutrientes .

La receta que comparto hoy contigo es una fusión de estilos culinarios dando como resultado un mousse espectacular, delicioso, delicado, refrescante, saludable y con propiedades depurativas de las fresas y del agar-agar.

El agar-agar, no es una alga propiamente, sino el resultado de extraer la gelatina de unas algas de Japón. Siendo muy útil en la cocina como gelatina vegetal. Con propiedades muy depurativas, prebióticas y laxantes por su alto contenido en fibra. Dando una energía fría se aconseja su uso en épocas y/o cuerpos cálidos. En las tiendas especializadas en productos ecológicos las podemos encontrar con el formato en tiras, copos, o polvo. Siendo los dos últimos los más aconsejables por tener un efecto gelificante  más potente.

A parte, hay un motivo aún más especial que me hace mucha ilusión de compartir esta receta  contigo ya que fue una de las que hice en los showcookings del Festival Orgànic que se celebró el pasado fin de semana, 27 y 28 de mayo en el Museu Marítim de Barcelona. Tuvo tal éxito que he decidido que tiene que llegar a muchas más personas. ¡¡Porqué lo bueno compartido se multiplica!!

Fue una experiencia muy bonita la cuál estoy enormemente agradecida por el apoyo de todo el equipo del Festival, la ayuda de Marta Vergés, el apoyo fantástico de todos los que vinisteis a los showcookings… ver vuestras caras de placer al degustar mis recetas es la máxima recompensa! ¡MIL GRACIAS!

Decirte también que las fotos tan preciosas que ves en este post la mayoría las hizo  Rosa Maria Lema que vino a verme al showcooking de SWEETS & HEALTHY MOMENTS . Rosa es creadora de un blog muy bonito donde comparte su pasión por una cocina saludable y vegetariana creando unas recetas súper deliciosas ! Yotambienmecuido.com

Me quedé tan  feliz y contenta de lo que llegó a gustar el Mousse de fresas con glaseado de coco… que aquí te la traigo.

Te dejo la receta.. ya verás que te sorprenderá de lo fácil que es!

Ingredientes

molde de 25 cm

1’5l zumo de manzana eco

500g fresas eco limpias y cortadas en cuartos

100g fresas limpias y laminadas con las hojas (para decorar)

1 bandeja 125g de frambuesas: chafados y colados = jarabe de frambuesa

1 bandeja de moras

1 bandeja de frambuesas

1 bandeja de arándanos

3cs copos alga agar-agar

pizca de sal

ralladura de un limón eco

2 ramas de canela

6 anises estrellados

2cs goma guar de SALUD VIVA

Ingredientes glaseado de coco

2cs manteca de coco SALUD VIVA

2cp de aceite de coco SALUD VIVA

1CP Xylitol  SALUD VIVA

Ingredientes topping

fresas laminadas con las hojas

hojas de menta

Preparación

1. Pon a hervir el zumo de manzana con la canela, el pellizco de sal, los anises y el alga agar- agar durante 8′ o según instrucciones de la marca. Cuando empiece a hervir baja el fuego para evitar que sobresalga. Aparta del fuego y deja reposar hasta que esté bastante frío. Este detalle es muy importante para evitar oxidar leas fresas.

2. Cuela, añade las fresas, el jarabe de frambuesa, la ralladura del limón, la goma guar y bate hasta que quede una textura fina.

3. Evoca en el molde y añade los frutos del bosque encima porque cuando el gires quedarán de base. Dejar enfriar en la nevera un mínimo de 2h o mejor toda la noche.

4. Antes de servir prepara el glaseado de coco. Deshaz al baño maría a baja temperatura la manteca de coco y el aceite de coco. Batelos con un mini blender o batidora junto con el xylitol. Deja reposar hasta que se enfríe y espesa un poco.

5. Cuando el mousse esté solidificado con mucho cuidado desmóldalo . Sólo será necesario que le hagas entrar un poco de aire y al girarlo caerá por su propio peso.

6. Preséntalo con el glaseado de coco, fresas y hojas de menta fresca.

¡¡Ya ves lo fácil que es y te prometo que te encantará!!

Mousse sin el glaseado en caso de que no te guste el coco